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Los placeres y los días.

“Si corres para intentar atrapar la vida, morirás en el intento. Si persigues al tiempo como si fuese un bandido, se acabará comportando como tal; siempre te sacará muchos metros o kilómetros de ventaja, se cambiará de nombre o de color de pelo para darte el esquinazo, se escabullirá por la puerta trasera del hotel justo cuando tú entras por la puerta principal con una orden de registro, dejando una colilla humeante en el cenicero para jorobar. En algún momento no te quedará más remedio que dejarlo, porque el tiempo no se va a parar nunca. Tendrás que admitir que no puedes darle caza. Y que, además, tampoco tienes por qué hacerlo. En algún momento tienes que aceptar las cosas como son y quedarte quieta y dejar que las cosas pasen solas.” —Elizabeth Gilbert Puertas de la Fachada de la Natividad de la Sagrada Familia - Octubre 15 de 2016

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